No hay una única manera de desglosar la influencia de Timberland. La marca de botas y ropa ha tenido un gran impacto
comprar baratas timberland online global, especialmente en la moda y la música, y solo se está fortaleciendo. Ahora Timberland también es un innovador digital. En una exclusiva de Complex, nos complace anunciar el lanzamiento de TimbsTrails de Timberland, una nueva experiencia digital gamificada que presenta a Fat Joe de Bronx que se lanzará mañana. TimbsTrails rastrea el pasado, presente y futuro de la marca, ofreciendo a los usuarios oportunidades para aprender y explorar.
"No seríamos nada sin las comunidades que nos adoptaron en la cultura en lugares como la
timberland hombre squall canyon venta baratas ciudad de Nueva York y Londres... hicieron de nuestra bota un ícono", explicó a Complex el vicepresidente de marketing global de Timberland, Drieke Leenknegt. Desde viajar a Nueva York en los años 90 hasta saltar al futuro para echar un vistazo a los planes de Timberland para dejar un legado sostenible, TimbsTrails les brinda a los fanáticos la oportunidad de ingresar a un mundo especial que se puede jugar en su teléfono móvil, tableta, o computadora.
"El consumidor vive sin problemas en todos estos entornos... en el mundo real, en el mundo digital y en el meta", señaló Leenknegt.
timberland hombre treeline comprar“Ya no hay distancia entre estos tres tipos de realidades… así que para nosotros, nuestra misión es estar donde ellos están. Y para interactuar y participar como marca en estos espacios… y hacer ese viaje con ellos juntos”.
“TimbsTrails me hizo recordar mi conexión con el arranque todos estos años y pensar en el futuro”, agregó
timberland hombre radford baratas Fat Joe. “Puedes encontrarme en el camino, contando historias sobre la ciudad de Nueva York en los años 90: el estilo, la música, la moda. El estilo Hip Hop en esos días era jeans holgados, cadenas de oro, chaquetas hinchadas y un par de timbales. Y algunas cosas, como lucir unas botas Timberland, nunca cambian ni pasan de moda”.
